Tu regalo de septiembre de 2020
Este mensaje te lo ofrece la Fuente para ayudarte en tu camino de crecimiento.
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« ¿Qué es la fe?
Es ante todo el reconocimiento total del ser de Luz que eres y de su infinito poder de creación. Así que tómate el tiempo para conocerte a ti mismo.
Haz que tu cuerpo respire consciente y profundamente.
Impónle tu presencia de Amor. Oblígale a reconocerte, a que preste atención al resplandor del sol que eres. Calma sus ansiedades, sus preocupaciones. Llévalo a otro espacio. Sácalo de sus instintos de supervivencia. Dale reposo. Brilla en él.
Nutridas por tu luz, todas sus células se relajan y tienen la capacidad de recuperar su frecuencia original de vida.
Tómate el tiempo para dar la bienvenida a este cuerpo de materia, para aceptar sus divagaciones mentales, sus arrebatos emocionales.
Este cuerpo necesita anclarse; dale este anclaje, este puerto de origen, haciéndole sentir el resplandor del sol que eres. Vive conscientemente en su pecho y haz que respire profundamente.
La fe puede cambiar instantáneamente la materia.
Se te ha dicho que hagas espacio para tu luz, en tu cuerpo físico, y también que silencies tu mundo interior, este ruido incesante. Presta toda la atención que puedas a lo que le está sucediendo a tus diferentes cuerpos, a todas esas creencias, estas certezas que roban tu energía y mantienen vivo un personaje falso. Haz esto identificándote con el ser de luz que eres.
Toma posición, observa sin abandonar tu cuerpo de materia, y elige conscientemente lo que alimentas y lo que dejas morir. Tus responsabilidades son grandes en lo que respecta a tu cuerpo humano. Es tu primer lugar para experimentar tu poder de creación, tu fe. Tómate el tiempo, identifícate con el sol que eres, siente, a través de tu cuerpo físico, su calor.
Deja que tu luz invada todo el espacio interatómico de tu cuerpo físico.
Deja que la vida eterna de tu verdadero ser invada la vida material de los átomos de tu cuerpo.
Ten en cuenta que un sol más grande nutre el tuyo. Y que un sol aún mayor lo nutre a su vez. Nunca estás solo, amigo mío; sólo tu mundo interior te aísla del Todo.
Silencio, respiración … el maestro se instala en su templo y la armonía vuelve al reino.
Rectitud, fortaleza, potencia, inquebrantabilidad, estas son algunas de las cualidades de tu esencia. Transmite estas cualidades a tu cuerpo humano.
Silencio, respiración, paz interior.
Sencillez y poder.
Ten fe en Ti y toda la energía del Universo responderá a tus llamadas.
Tómate el tiempo para Amar tu cuerpo, estar presente para él, para ayudarlo en su necesaria transformación, a través del silencio y la respiración.
Una última respiración profunda antes de dejar que tu cuerpo recupere su ritmo natural.
Tú, no abandones tu trono, permanece bien instalado en tu templo de cristal, en el centro del pecho de tu cuerpo humano. Continúa observando, eligiendo qué alimentas y hasta pronto. »
Mensaje de la Fuente canalizado por Mario-Gaal
Ofrecido con el Boletín de noticias de Reine-Claire y Mario-Gaal de septiembre de 2020
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