Alao Saya
El Encuentro Internacional Alao Saya 2020
Del 28 de octubre al 1 de noviembre, 64 almas se reunieron para afirmar su elección de contribuir a la creación del nuevo mundo.
Los cuerpos físicos estaban en Quebec, Costa Rica, Francia, España e Italia. Las conciencias se comunicaron a través de la energía e intercambiaron durante reuniones regulares en las ondas de Internet.
Una veintena de personas más también siguieron esta reunión a distancia, sin pasar por Internet.
Unidos en una misma intención, con el corazón abierto a lo nuevo, todos los participantes estaban dispuestos y listos para las semillas que el grupo produciría para que la humanidad pudiera evolucionar de manera serena, en condiciones favorables para todos.
Lo vivido estuvo repleto de presencia consciente. Los participantes de los diferentes países estaban todos investidos de esta convicción de que nosotros, los pueblos de la Tierra, podemos cambiar todo en este mundo y que debemos asumir nuestras responsabilidades como co-creadores conscientes.
Hemos sido conscientes de las consecuencias de alimentar la frecuencia del miedo y la importancia de la presencia consciente.
Se nos ha recordado el deber que nos incumbe de no entrar en el juego de los Otros, sin por ello ignorarlo; y se nos ha dicho que, en cambio, nos esforcemos por sembrar siempre más paz y Amor, cultivando este estado dentro de nosotros primero y manteniendo el rumbo en este aspecto esencial en estos tiempos de turbulencia en nuestras sociedades.
Un encuentro final de todas las dimensiones en el círculo sagrado de piedras del Cortijo Los Baños en España, nos brindó la oportunidad de sentir con fuerza todo el poder de la unión consciente de las almas que somos con las de otras dimensiones de existencia.
Este momento de cierre amplificó el poder del trabajo planetario iniciado al comienzo del encuentro, gracias a la energía del círculo de piedras unida a esta fuerza de presencia y unión.
Todos pudimos «ir» vía Zoom a este lugar sagrado, gracias a las cámaras que se habían instalado allí. También hicimos “vivir” la experiencia a nuestros cuerpos físicos al caminar realmente en el espacio donde estábamos, al proyectarnos intencionalmente en el pequeño camino que conduce al círculo de piedra en España y al pronunciar nuestro nombre en el momento de «entrar» en el círculo.
Quienes estaban físicamente presentes en el lugar en España nos confirmaron que sí habían sentido el círculo de piedra llenarse de nuestras presencias, y lo mismo al final de la experiencia, cuando el círculo se vació, marcando la conclusión. del encuentro internacional.
Haz clic aquí para leer el mensaje de la Fuente recibido por Mario-Gaal el segundo día de este encuentro: esperamos que os permita sentir la calidad de lo vivido.